Son vainas redondeadas, firmes y crujientes muy utilizadas para consumo en la cocina en fresco o ligeramente cocido para no perder sus propiedades. Son una rica fuente de antioxidantes y vitaminas, en las que destacan el retinol, B6, C y proteínas como lisina, un aminoácido esencial para la absorción ideal de minerales como calcio, hierro, fósforo y zinc. Puedes incluirlas fácilmente en platillos con carnes rojas y blancas así como en diversas ensaladas.